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HIDRATACIÓN

Publicado por Pablogueb

Una correcta ingesta de líquidos antes, durante y depués del esfuerzo físico mejorará considerableme

INTRODUCCION
El principal cometido del siguiente trabajo,no es otro que destacar la importancia de un elemento basico en nuestra subsistencia como es el agua y todo lo relacionado con la hidratacion. No solo es importante para el deportista,sino,que lo es tambien para la persona sedentaria,para el buen funcionamiento del organismo. Es muy tipico en las salidas quatreras, no llevarse nada de liquido(agua o bebida especial),la parada a tomarse las cervecitas,los vinitos y demas,lo cual nos provoca un deficit de agua en nuestro organismo,provocandonos cansancio,calambres entre otra cosas que veremos mas adelante,lo cual tiene una incidencia clara en la perdida de atencion y desconcentracion,pudiendo llevarnos a cometer errores en la conduccion.
Otro cometido del trabajo de hidratacion es complementar al de preparacion fisica y alimentacion.Vamos juntando las piezas del exito deportivo
La cervecita (muy sana por otro lado) mejor para despues de la ruta,cuando no tengamos que estar concentrados para evitar percances.

HIDRATACION
Si se va a practicar deporte de modo intenso, no se debe esperar a tener sed para beber; hay que aumentar el consumo de líquido antes, durante y después del esfuerzo físico. Mantener una alta ingesta de líquidos es aconsejable en cualquier momento del día, ya que favorece la eliminación de residuos y evita el deterioro asociado a la ausencia de agua en el cuerpo. Un consumo correcto de agua contribuye a retrasar la aparición de la fatiga. Beber agua con regularidad evita estos problemas. Asimismo, las bebidas hidrolizadas pueden ser aconsejables en deportistas, siempre que sean isotónicas/hipotónicas, con una concentración de sales inferior a la del suero. Los deportistas no deberían consumir bebidas hipertónicas mientras realizan esfuerzo físico o después, ya que poseen un exceso de sales que retrasan su absorción y obligan al organismo a aumentar la pérdida de orina contribuyendo a la deshidratación.

De todos es conocida la importancia para nuestro organismo que tiene el agua, pero en el caso de deportistas se le debe tener una consideración especial, ya que puede ser un factor limitante para la practica del ejercicio físico y por tanto para el rendimiento.

Si no hiciéramos ejercicio físico la ingesta diaria de agua recomendada es de 6 a 8 vasos, lo que viene a equivaler a aproximadamente 2 litros de agua al día. A esta cantidad diaria hay que añadirle las perdidas producidas por el ejercicio, ya sea un partido o un entrenamiento. Cuando comenzamos a deshidratarnos la temperatura corporal aumenta y esto hace que se pierdan numerosos minerales esenciales, especialmente potasio y sodio, los cuales están íntimamente relacionados entre sí y tienen la función de mantener el equilibrio homeostático del organismo, es decir, mantienen el equilibrio hídrico y electrolítico de las células. De tal manera que una perdida de alguno de ellos puede ocasionar arritmias, calambres y, por supuesto, la deshidratación. Pero además un músculo que se deshidratara un 3% puede perder hasta un 10% de la fuerza contractil y un 8% de la rapidez.

Síntomas de deshidratación:
· Mareos
· Dolor de cabeza
· Piel enrojecida
· Debilidad y fatiga
· Sequedad en la boca
· Perdida de apetito

Síntomas de deshidratación avanzada:
· Visión borrosa
· Perdida de audición
· Piel seca
· Pulso acelerado y perdida de aliento
· Dificultad para mantener el equilibrio

Para evitar la deshidratación debemos de tomar además de los 6 u 8 vasos de aguas mencionados anteriormente, medio litro de agua más por cada hora de entrenamiento o partido. Como consejo y para establecer buenas costumbres debéis tomar dos vasos de agua antes de cada comida, lo cual además hará un efecto saciante y os ayudará a no sobrepasar la cantidad de comida que ingerís. Y siempre llevad una botella de agua al hacer ejercicio, y comenzad a beber antes de que empiece la sed, aunque no tengáis ganas, comenzad con pequeños sorbos.

APROVECHAMIENTO OPTIMO DE LA INGESTA DE LIQUIDOS

Existen principalmente tres factores a tener en cuenta si quiere conseguir el aprovechamiento óptimo de cualquier bebida si se practica deporte.

En un deportista la velocidad de vaciado gástrico de cualquier bebida, es decir, el tiempo que tarda en pasar el contenido del estómago hacia el intestino, puede condicionar su rendimiento. Una velocidad de vaciado gástrico elevada, provoca mayor peristaltismo o movimiento intestinal y en consecuencia riesgo de diarrea. Por el contrario, si el vaciado gástrico es lento, no se obtienen tan rápidamente los beneficios esperados con la ingesta del líquido. En un deportista, la velocidad de vaciado gástrico depende fundamentalmente de tres factores: temperatura del líquido ingerido, consumo de oxígeno y osmolaridad de la bebida administrada.

El 60-65% de la composición corporal es agua, con una perdida de agua por encima del 2% del peso corporal se producen alteraciones en la capacidad termoreguladora, con la perdida del 3% ya se produce una disminución del rendimiento, y si llegáramos a perdidas superiores al 6% se produciría el agotamiento, coma y la muerte; de ahí la importancia para nuestro metabolismo de mantener una buena hidratación. Se recomienda una ingesta diaria de 2-3 litros de agua para mantener una buena hidratación celular.

Durante el ejercicio físico, como ya hemos comentado, se produce un aumento de las perdidas, durante el ejercicio la sudoración aumenta para compensar el aumento de la temperatura corporal, por lo que el aporte de agua tiene que ser mayor. Si el deporte se practica en un ambiente caluroso y húmedo la evaporación del sudor disminuye y se pierde sin que sea útil para disminuir la temperatura corporal, por lo que las necesidades hídricas serían todavía mayores. Si el ejercicio físico es de poca intensidad y corta duración (inferior a una hora), en principio no sería necesario una suplementación hídrica, ya que nuestro propio organismo al metabolizar los alimentos produce agua, que en actividades de baja intensidad sería suficiente para compensar las perdidas. Sin embargo en ejercicios de mayor intensidad y por encima de una hora es necesaria la suplementación hídrica, en estos casos se recomienda ingerir 500 ml de agua en la hora previa a la realización del ejercicio, pudiéndose añadir 40-60 gr. de hidratos de carbono y 0,5 gr. de cloruro sódico. Durante el esfuerzo se recomienda mantener una hidratación de 200 ml cada media hora. Después del esfuerzo se aconseja ingerir agua a voluntad, con un mínimo de 500 ml de agua en la hora posterior al ejercicio añadiendo 50-60 gr. de hidratos de carbono, para empezar a suplementar el gasto producido durante el mismo .

Temperatura del líquido : En algunas ocasiones podremos actuar sobre la temperatura del líquido ingerido, fundamentalmente en los deportes de equipo, donde hay una persona encargada de estos menesteres, que procurará refrigerar este tipo de bebidas para que al ser administradas estén entre los 9 y 15 grados centígrados, considerados como la temperatura óptima.
Consumo de oxígeno : La incidencia del consumo de oxígeno es importante, ya que para valores cercanos al 70% del VO2 (consumo de oxígeno) máximo y superiores, comienza a decrecer muy rápidamente la velocidad de vaciado gástrico. Es éste un factor sobre el que no podemos nunca incidir, ya que el deportista es un sujeto en acción dinámica continua en algunas ocasiones, discontinua en otras y va a necesitar la bebida en cualquier momento de su actividad deportiva.
Osmolaridad: Existe un tercer factor que sí podemos controlar para que afecte lo menos posible al vaciado gástrico: la osmolaridad del preparado elegido. Los productos hiperosmóticos sabemos que vacían lentamente, los isotónicos lo hacen mucho mejor, pero sólo aquellas bebidas con osmolaridades no superiores a 287 miliosmoles/litro y no inferiores a 225 miliosmoles/litro siguen vaciando bien y por lo tanto aprovechándose cuando los VO2 están alrededor del 70% o por encima, lo cual es muy normal al practicar cualquier modalidad deportiva en la que la sudoración sea importante.
Por todas estas consideraciones, las bebidas que cumplen con los requisitos mencionados satisfacen en todos los momentos de la práctica deportiva, tanto antes, durante y después del esfuerzo, todas las necesidades relativas a una correcta hidratación: reposición de líquidos, sales minerales y frenando en parte la pérdida de tejido muscular.

Ingestión de fluidos antes del ejercicio:
Es muy importante que junto con una alimentación adecuada en el deportista (ver artículo al respecto), se ingiera una cantidad adecuada de líquidos con el objeto de llegar a una competencia o enfrentar un entrenamiento con una hidratación adecuada. Es claro que un deportista deshidratado parte en desventaja respecto de otro bien hidratado, como lo demuestra la investigación de Amstrong y colaboradores, donde los sujetos corrían 5000 y 10000 metros bien hidratados y con una deshidratación inducida por diuréticos. Cuando la deshidratación llegaba al 2% del peso corporal la velocidad de carrera disminuía significativamente en ambas distancias (6-7%).

La posición del colegio americano de medicina del deporte, señala que es recomendable beber 500 ml de líquidos 2 horas antes de realizar ejercicios para promover una adecuada hidratación y dar tiempo para excretar el excedente de agua ingerida.

En estudios experimentales se demostró que sujetos que ingirieron líquidos una hora antes del ejercicio presentaron menor aumento de la temperatura corporal respecto de quienes no ingirieron.

Desde un punto de vista práctico, la frecuencia de micción, el color y el volumen de la orina pueden ser monitorizadas como medio para ayudar a los deportistas a determinar su estado de deshidratación. Una micción infrecuente con orina oscura y poco volumen puede ser indicación de deshidratación.

Ingestión de fluidos durante el ejercicio:
“Durante el ejercicio, los atletas deberían comenzar a hidratarse tempranamente y a intervalos regulares intentando consumir fluidos a una velocidad suficiente para reemplazar todo el agua que se pierde a través del sudor”. Esta es la posición del colegio americano de medicina del deporte respecto de la ingesta de fluidos durante el ejercicio. Es claro que la deshidratación compromete la función termorregulatoria, las respuestas cardiovasculares y el rendimiento físico y que estas se ven mejoradas con la reposición de al menos un 80% de las pérdidas producidas por el ejercicio (Montain y Coyle, 1992). Estos investigadores demostraron en sujetos sometidos a bicicleta por dos horas con distintos niveles de hidratación, desde sin ingerir líquidos hasta mucho líquido, diferencias de un grado de temperatura corporal al final del ejercicio y 25 latidos cardiacos más por minuto.

¿Que tipo de bebida usar para hidratarse adecuadamente?
El agua es la mejor forma de hidratarse adecuadamente. La adición de carbohidratos se recomienda para ejercicios que se prolonguen por más de una hora, con el objeto de preservar por más tiempo las reservas de glicógeno corporal. El aporte debe ser de 30 a 60gr. por hora en volúmenes de 600 a 1200ml. por hora. La mayoría de las bebidas isotónicas disponibles tienen de 6 a 7% de concentración de carbohidratos por lo que aportarías 60 a 70gr. por litro, por lo que un litro de estas bebidas aporta una cantidad adecuada de carbohidratos. La adición de sales en las bebidas isotónicas ayuda a prevenir hiponatremias en aquellos sujetos que tengan sesiones de entrenamiento muy prolongadas. El hecho de que estas bebidas cuenten con sabores ayuda mucho a que sean más consumidas que el agua corriente.

Ingestión de fluidos luego del ejercicio:
La ingesta de fluidos luego del ejercicio es fundamental para la adecuada recuperación de un deportista entre los entrenamientos y la competencia. Una manera práctica de determinar la reposición adecuada de fluidos es pesar al deportista antes de entrenar y luego de entrenar y recuperar ese peso como líquidos. Sin embargo existen investigaciones que señalan que es necesario recuperar un 150% del peso perdido para hidratarse adecuadamente.


PUNTOS FUNDAMENTALES

1. Durante el ejercicio prolongado, al calor, las personas pierden en promedio de 1 a 2 litros cada hora (aproximadamente 1 a 2 kilos por cada hora de ejercicio). El ritmo de deshidratación puede ser monitoreado al registrar el peso sin ropa. Cada 500 gramos corresponden a 450ml. de deshidratación.

2. Hasta la más mínima deshidratación produce consecuencias fisiológicas. Por ejemplo, cada litro de agua que se pierde causará que el ritmo cardíaco aumente en 8 pulsaciones por minuto, el volumen minuto cardíaco se reducirá en 1 litro por minuto, y la temperatura corporal aumentará 0.3° C cuando una persona ejercita a una temperatura elevada.

3. Para una persona de 68 kilos, los requerimientos de carbohidratos (30 a 60 gramos/hora) y líquidos durante el ejercicio prolongado pueden ser compensados al beber entre 625 1250ml/h de bebidas conteniendo entre 4 y 8% de carbohidratos. El volumen debe ser compensado para los distintos pesos.

Evitar las bebidas con cafeína
Algunas bebidas que contienen cafeína, como gaseosas y té, son vendidas como bebidas para quitar la sed. No use bebidas que contengan cafeína, como bebidas para hidratar y reponer líquidos, antes, durante o después de una competencia o práctica. La cafeína actúa como diurético. Incrementa la producción de orina y promueve la deshidratación.

Es necesario el liquido para los deportistas?
Su mayor preocupación es obtener suficiente agua—pura y fría. La sal que usted pierde mientras suda puede ser fácilmente repuesta añadiendo sal a sus comidas.

Agua pura y fría es el líquido preferido cuando hace ejercicio por no más de 60-90 minutos. Eso incluye la mayoría de deportes, inclusive una sesión de práctica intensa, un juego de fútbol difícil o una competencia de pista. Usted no necesita una fuente de energía en los líquidos que toma para hidratarse. Durante esas condiciones normales, si usted ha comido y ha entrenado apropiadamente, usted debe tener guardada la energía suficiente, como glicógeno en su hígado y músculos para mantenerlo durante esta competencia.

Sin embargo, en algunas situaciones donde el ejercicio es muy largo o varios juegos ocurren en un corto periodo de tiempo, bebidas para deportistas que contienen carbohidratos y electrolitos podrían ofrecerle una ventaja. Durante estas situaciones, sus reservas de energía y electrolitos podrían estar bajas. Por ejemplo, si es un ciclista de largas distancias, debería considerar el uso de una bebida para deportistas. Si usted compite en un torneo que requiere más de un juego al día o varios juegos en un par de días, usted podría beneficiarse de las bebidas para deportistas que tienen y suministran energía y electrolitos. Hay muchas y diferentes bebidas comerciales para deportistas, disponibles en el mercado. Estas contienen una variedad de tipos y cantidades de carbohidratos y electrolitos. Si usted usa una bebida para deportistas, elija una que tenga menos del ocho por ciento de sólidos (carbohidratos, electrolitos.) Soluciones más concentradas podrían demorar la absorción de líquidos. Estos sólidos deben ser diluidos en agua pura antes de su uso como bebidas para reponer líquidos. También, evite bebidas para deportistas que contienen fructosa como la única fuente de carbohidratos. La fructosa podría demorar el vaciamiento gástrico y podría causar malestar estomacal. Además, la fructosa debe primero convertirse en glucosa antes que pueda ser usada como energía. Esta conversión significa que usted no puede usar fructosa como una fuente rápida de energía como otros carbohidratos.

Jugos de frutas tales como jugo de naranja, deben ser diluidos si los está usando como bebidas para reponer líquidos antes, durante y después de un juego o práctica. Jugos de fruta varían de 10% a 17% en la concentración de carbohidratos. Dilúyalos en una cantidad igual de agua pura, antes de usarlos como reposición de fluidos. Por supuesto, cuando usted toma jugos en otras situaciones, tales como una comida o merienda, usted no tiene que diluirlos.

Resumiendo ...
Aproveche cada oportunidad para tomar agua y otros líquidos apropiados. Tome líquidos cada día, inclusive cuando usted no tenga sed.
Tome líquidos apropiados en abundancia, 24 horas antes de un evento. Dele a su cuerpo todas las oportunidades para hidratarse completamente.
Si usted come antes de la actividad, tres o cuatro horas antes del evento, asegúrese de tomar muchos líquidos —como mínimo dos vasos.
Como mínimo 15-30 minutos antes de empezar la competencia o práctica, tome un vaso o más de líquidos. Esto ayudará a que sus tejidos estén plenamente hidratados para el evento.
Durante la actividad, tome líquidos, cada 15 ó 20 minutos. Tomar cantidades moderadas frecuentemente es la mejor manera de mantener elevados los niveles de líquidos. Si usted bebe demasiado líquido y muy rápido, podría desarrollar calambres estomacales y otras incomodidades.
Tome líquidos abundantes después del evento. Si usted se pesa antes y después de las actividades, tome dos vasos por cada 5oo gramos de perdida hasta que esté dentro de su peso antes de la actividad.
Recuerde tomar líquidos antes de que usted tenga sed. Si usted espera hasta que tenga sed, su cuerpo podría haber perdido suficiente agua y afectar su funcionamiento.
Consumir líquidos significa que usted puede rendir en sus mejores niveles. Su resistencia durará más tiempo y usted no se sentirá cansado. Usted tendrá ese margen extra cuando más lo necesite —ya sea en los últimos minutos de la competencia o en los últimos 10 metros antes de la meta.

Conclusiones

La deshidratación puede acontecer bajo diferentes circunstancias, si bien, su aparición es directamente proporcional a la duración del ejercicio y la cantidad de calor que haya durante el transcurso del mismo.
Para que la deshidratación no afecte a nuestro rendimiento deportivo es necesario una correcta rehidratación durante el transcurso del ejercicio físico.
Las bebidas administradas para reponer electrolitos durante el ejercicio deberán tener hidratos de carbono en concentraciones reducidas (5-8%), así como permanecer a temperaturas entre 10 y 15ºC, lo cual permitirá que el vaciamiento gástrico sea rápido.
Además, cada atleta tiene unas determinadas pérdidas y necesidades de ingesta por lo que es recomendable utilizar los entrenamientos para experimentar con diferentes bebidas.

1.- Estar bien hidratado es un factor fundamental para tener un estado óptimo de salud, se realice o no ejercicio físico.
2.- En ausencia de actividad física se pierden al día entre 2-3 litros de líquido de nuestro organismo (sudor, orina, por la piel…).
3.- Al realizar ejercicio físico la pérdida de líquido , y por tanto la necesidad de su reposición, aumenta de forma muy importante.
4.- Hay que beber líquidos antes de que aparezca la sensación de sed.
5.- Cuando se hace ejercicio físico hay que beber líquidos antes, durante y después del mismo .
6.- La ingesta (el consumo) de líquidos al realizar actividad física siempre tiene efectos positivos , sea cual sea su temperatura, aunque las bebidas frías, además de absorberse más rápido, son más apetecibles.
7.- La mayor diferencia entre las distintas bebidas deportivas comerciales esta en su concentración en hidratos de carbono.
8.-El consumo de una bebida deportiva con algo de hidratos de carbono contribuye a prevenir la aparición de fatiga temprana , lo que permite realizar ejercicio durante más tiempo, con lo que se gastara más cantidad de energía.
9.- La inclusión de pequeñas cantidades de sodio y potasio en las bebidas deportivas es bueno,
10.-Para que el organismo funcione bien debe mantener un equilibrio sano de líquidos y los electrolitos ayudan a regularlo.

Hay muchas ocasiones en los que el consumo de una bebida deportiva produce beneficios superiores al consumo de agua, pero no hay casi ninguna ocasión en la que el consumo de agua sea superior al de una buena bebida deportiva, si ésta se elige bien


PROFUNDIZANDO EN LOS CONOCIMIENTOS: ASPECTOS TECNICOS SOBRE HIDRATACION

Las características que debe tener una apropiada solución de rehidratación oral según Gisolfi y Duchman (1992) son:

•  Proporcionar substrato.
•  Reemplazar electrolitos.
•  Reemplazar fluido
•  Reforzar la absorción
•  Sabroso
•  Mantener el volumen plasmático.

Se han realizado numerosos estudios para saber cuál es la proporción ideal de hidratos de carbono en las bebidas deportivas. En general se admite que el vaciamiento gástrico se inhibe a medida que aumenta la concentración de los hidratos de carbono de una bebida (Brouns, 1991; Veicsteinas y Belleri, 1993; Helzer-Julin, 1994; Matthew y cols., 1994). Un vaciamiento gástrico lento puede causar deshidratación, alteración de la disipación de calor, calambres abdominales y diarrea. Las concentraciones de hidratos de carbono recomendadas oscilan entre el 2 y el 10% (Helzer-Julin, 1994). Pese a que algunos autores hablan de concentraciones de 5-10% (Burke y Read, 1993), algunas autoridades (ACSM) en la materia creen que las más seguras y eficaces están entre el 6 y el 8% (Helzer-Julin, 1994). La Tabla 7 muestra cual debe ser el volumen de ingesta de una determinada concentración de hidratos de carbono, en relación con la velocidad de vaciamiento del estómago (Coyle y Montain, 1992). Los parámetros de la franja intermedia son los más eficaces de cara al rendimiento deportivo.

Galloway y Maughan (2000) compararon dos diluciones distintas de hidratos de carbono, la primera con una concentración de un 2% y la segunda con una concentración de un 15%. Con la primera de ellas consiguieron reponer el 156 + 49.5% de las pérdidas de agua. Con la segunda bebida (15% HC) repusieron el 101 + 36.8% de las pérdidas de fluido. Ambas bebidas retrasaron más la aparición de la fatiga con respecto al grupo que no ingirió fluidos.

El vaciamiento gástrico se maximiza cuando la cantidad de fluidos en el estómago es alta, mientras que se reduce con fluidos hipertónicos o cuando la concentración de carbohidratos es mayor o igual a un 8%; pese a esto, los fluidos que contienen de un 4% a un 8% de carbohidratos pueden, generalmente, ser vaciados a un ritmo de 1 L por hora en mucha gente cuando el volumen gástrico se mantiene a 600ml. o más (ACSM, 2000).

En cuanto al tipo de CHO incluido, se han propuesto diferentes azucares por su osmolaridad e índice glucémico, como la fructosa, glucosa, maltodextrina. De todos ellos el más interesante es la maltodextrosa, ya que su absorción es mejor que en los demás, no llegando a crear hipoglucemia en el caso de una ingesta elevada, como ocurriría con la toma de glucosa. El principal problema reside en adquirirla, por la dificultad de encontrarla y su precio, al igual que ocurre con la fructosa. Por ello, seria recomendable la utilización del azúcar convencional, formado por sacarosa, es decir, fructosa y glucosa, a partes iguales, siendo su utilización más fácil y barata (Merchant, 1999).

Basado en un gran número de estudios, Brouns (1991) estableció que no hay diferencias en cuanto a la velocidad de vaciamiento gástrico entre: situación de reposo y ejercicio por encima del 70% VO 2 máx., ni entre sujetos entrenados y no entrenados. En relación con el vaciamiento gástrico, Shi y cols. (2000) estudiaron la influencia de la temperatura de las bebidas de reposición en relación a la velocidad de vaciamiento del estómago. Cinco minutos después de la ingesta, la bebida fría (12ºC) se había templado por encima de los 30º C en el estómago, sugiriendo que el efecto de las soluciones a temperaturas frías sobre el vaciamiento del estómago es probablemente escaso y transitorio.

SODIO.
Ha sido reconocido que el Sodio mantiene la presión osmótica de los fluidos intra y extracelulares, conjuntamente con el ión Potasio actúa sobre la membrana celular interviniendo en la transmisión del impulso electroquímico y a nivel intracelular participan en diferentes reacciones metabólicas.

Se reporta por algunos autores que el ejercicio físico se acompaña de un aumento de la concentración plasmática de Sodio de 3 a 5 % respecto al valor de reposo (9, 10, 18). Este aumento representa el efecto de la hemoconcentración inducida por el ejercicio. En nuestro trabajo se encontraron incrementos inferiores a los esperados por la hemoconcentración lo que evidencia una reducción de la cantidad total de Sodio plasmático.

El sudor representa la vía mas importante de dispersión del Sodio durante el ejercicio, a consecuencia de un trabajo prolongado e intenso se han registrado pérdidas sudorales alrededor de 4 litros. Aunque en el presente estudio no se midió la cantidad de sudor, esta fue muy profusa sobre todo por la elevada temperatura y humedad relativa ambiental en las dos últimas horas del trabajo físico realizado. A los 60 minutos el Sodio plasmático se encontró alrededor de los valores de reposo a pesar de que se mantuvo la hemoconcentración, lo cual indica que aún no habían funcionado los mecanismos adaptativos fisiológicos tendientes a normalizar el volumen plasmático.

POTASIO.
La concentración de Potasio intracelular tiene efecto directo en las funciones musculares incluyendo la cardiaca así como en la transmisión del impulso electroquímico. Este ión resulta necesario en muchas reacciones metabólicas. La pérdida de Potasio ocasiona debilidad, trastornos del ciclo y repolarización cardiaca y en casos extremos lesiones cardiovasculares, musculares y renales irreversibles.

Los efectos del ejercicio sobre los cambios de Potasio en plasma han sido estudiados por varios investigadores (18,19). Se han reportados incrementos de hasta un 20 % del valor de reposo con cifras de 5.5 mE/l hasta 6.0 mE/l (12). En nuestro estudio encontramos valores hasta de 5.5 mE/l , aunque la media fue muy inferior. Los incrementos después del esfuerzo no alcanzaron la magnitud del cambio en el volumen plasmático por lo que al parecer se produjo una pérdida notable de este electrolito en los atletas estudiados a través de la sudoración profusa que estos presentaron a partir de las dos últimas horas del ejercicio, aspecto que puede resultar válido si se tiene en cuenta que es precisamente a través del sudor y la orina sus vías de excreción.

MAGNESIO.
Desde hace mucho tiempo se ha reconocido que este ion es importante en ejercicios físicos por su participación en las reacciones de fosforilación y óxido reducción. Es un cofactor para varias enzimas esenciales en el metabolismo energético. (11)

La concentración mayor de Magnesio se encuentra en el compartimento celular. Varios estudios han evidenciados declinación de la concentración de Magnesio en plasma después de ejercicios submáximos prolongados como la carrera de maratón (20). Sin embargo, parece ser que las variaciones del magnesio sérico dependen de de la duración del ejercicio (11) y según Haralambie(21) su descenso pudiera obedecer a un desplazamiento hacia el interior del eritrocito o a la necesidad de energía a nivel intramuscular por la movilización de los ácidos grasos. Por el contrario, este mismo autor ha reportado incrementos en su concentración en plasma inducidos por ejercicios intensos. No obstante, a pesar de este incremento se ha podido notar una disminución en el plasma cuando se le relaciona con el volumen plasmático (22).

CALCIO.
Ión de gran importancia para la contracción muscular por su participación en el acoplamiento del complejo actina-miosina además de otras funciones como cofactor enzimático, coagulación, etc.).

Experimenta pocas variaciones en su concentración plasmática producto del ejercicio. Algunos autores reportan variaciones ligeras y no siempre significativas en relación al valor basal, aunque el ejercicio exhaustivo puede favorecer su excesiva eliminación por el sudor(11). En nuestro trabajo encontramos incrementos significativos del contenido de Calcio en plasma al final de la actividad, manteniéndose elevado en relación al volumen plasmático, al parecer, este incremento es producido por salida del ion del espacio insterticial al plasmático. Una parte del mineral se pierde por el sudor, sin embargo, se señala que existe a nivel de la glándula sudorípara un mecanismo para preservar las reservas del ion Calcio. Los incrementos encontrados al final de la actividad tienden a normalizarse a la hora siguiente lo que sugiere la desviación intercompartimental de modo transitorio.

CONCLUSIONES.

Las variaciones encontradas en el contenido plasmático de algunos iones minerales en el curso del ejercicio físico son determinadas principalmente por:

q Reducción del agua plasmática con aumento relativo del Sodio y el Potasio.

q El Pool total de Sodio y Potasio se reduce a causa de su pérdida por el sudor.

q El incremento del contenido total de Calcio en el plasma se produce al parecer por desviaciones intercompartimentales.

q La pérdida de Magnesio plasmático pudiera estar relacionada por su eliminación a través del sudor, por el paso al espacio intracelular o para la producción de energía a partir de los ácidos grasos al nivel de la célula muscular.

q El análisis de los cambios en el volumen plasmático que ocurren durante la práctica de ejercicios físicos prolongados facilitan una mejor interpretación de las variaciones en las concentraciones electrolíticas.

Tabla No. 1 VARIACIONES DE LAS PROTEINAS TOTALES POR EL EJERCICIO

Estadígrafos

Reposo

Fin de la carga

60 minutos

72.79

82.52

78.77

DS

5.19

5.90

4.93